Breve comentario apocalipsis (1/2)

Breve comentario apocalipsis (1/2)

Breve Comentario, primera parte (capítulos 1 al 11)

Realmente hay que “asomarse” al libro de Apocalipsis con mucha precaución y prudencia, ya que distintos eruditos y estudiosos serios se acercan de esta manera a Apocalipsis, por tanto un simple estudiante de teología como es mi caso, aún más. El autor en mi opinión es el apóstol Juan, porque ante otras suposiciones, la tradición más temprana de la iglesia así lo creía.

Existe un contexto de persecución de la iglesia que hace que Juan esté exiliado en el libro de Patmos, durante el mandato del emperador Domiciano (año 94-96 d.C.) Además de la persecución romana también existe una oposición judía y expulsión de los convertidos al cristianismo de las sinagogas. Juan escribe a siete iglesias de Asia Menor (actual Turquía), donde precisamente el apóstol Juan estaba ejerciendo su ministerio, presisamente para revelar la persecución que tendría lugar con los cristianos, no sólo en este momento histórico sino también a lo largo de la historia hasta el regreso de Cristo Jesús; El mensaje es que a pesar del sufrimiento, la victoria final está asegurada, por tanto esto anima a perseverar hasta el fin.

Apocalipsis como indica su nombre, forma parte de una forma literaria apocalíptica, donde se usan simbolismos y figuras que se salen de lo real, así que aquí se mezcla lo literal con lo figurado (por ejemplo el uso de numerología) y por tanto hay que tener gran cuidado y prudencia a la hora de interpretar, usar bien la exégesis bíblica y no perder de vista en cada momento el contexto. Volviendo a la numerología frecuentemente se usa el número siete ( múltiplos de siete) como símbolo de la plenitud (7 días en la creación, p.e.) y el 12 (o múltiplos de 12) como ejemplo del pueblo de Dios (12 tribus de Israel, p.e.) Aquí hay que señalar que Juan no usa estos símbolos por voluntad propia, sino que pretende describir lo que está viendo y de lo cual no tiene palabras para hacerlo. Pero no solo es literatura apocalípitica, también incluye profecía, declaración de eventos futuros y también epistorales, ya en definitiva los receptores primeros serían los cristianos de estas siete iglesias de Asia, por lo que un buen principio de interpretación es tener en cuenta que esta carta se escribió para que estas personas entendieran su contenido antes de ser un contenido difícilmente descifrable o uno codificado.

La estructura de Apocalipsis es muy clara y por eso la recogemos aquí:

  • Capítulo 1, introducción
  • Capítulos 2 y 3, carta a las siete iglesias.
  • Capítulos 4 y 5, una visión del cielo y de alabanza celestial.
  • Capítulos 6 al 19, tres series de siete juicios cada uno (sellos, trompetas y copas)
  • Capítulo 20, el milenio.
  • Capítulo 21 y 22, visión del cielo y tierra nuevas.

Es importante en Apocalipsis entender que hay distintas posturas sobre el milenio descrito en el capítulo 20:4-15 respecto a la venida de Cristo, aquí podemos distinguir los premilenialistas (premilenialistas históricos) que indica que Cristo vendrá antes de este tiempo (la más extendida en los primerso siglos de la iglesia), los posmilenialista que dicen que Cristo vendrá después y los amilenialistas donde creen que este periodo no es literal sino espiritual, en este sentido la relación entre el arrebatamiento de la iglesia y el periodo de gran tribulación del que habla la Biblia también se ve afectado por los anteriores puntos de vista, ya que los “premilenialistas dispensacionalistas” indican un arrebatamiento (secreto) antes de la tribulación y los demás creen que este arrebatamiento se producirá cuando Cristo venga por segunda vez (su segunda venida).

            Lo que si me parece coherente es que los sucesos que aquí se describen son no solamente eventos que ya pasaron (en la época de Juan), o que están pasando (a lo largo de la historia), sino que también son eventos futuros que todavía están por venir y cumplirse.

            Sin entrar en detalle, debido al gran número y cantidad de ellos, pero también a la difícil interpretación a veces, en los primeros capítulos encontramos las cartas a las siete iglesias (cap. 2 y 3), que indican tanto alabanzas como críticas a prácticamente todas ellas; La crítica no es meramente informativa, sino que indica una serie de juicios que vendrían si la iglesia no cambia o se arrepiente. Lo que pretende Juan como decimos, es animar a las iglesias y que permanezcan fieles hasta el fin.

            Respecto a la representación del cielo que aparece en los capítulos 4 y 5, nos puede ayudar el saber que esta alabanza es dada tanto a Dios Padre, como a Cristo Jesús, representado aquí como un cordero, pero con un cordero que vence en contraste con el cordero sumiso que es entregado que aparece en los evangelios.

            En los capítulos 6 a 8 encontramos la primera serie de 7 juicios representados por los sellos, estos sellos que se sompen liberando los escritos de los rollos en los cuales están indican una liberación del contenido de los mismos y el comienzo de los juicios allí descritos, los primeros 6 sellos son juicios, el último sello es un preludio a la siguiente serie de juicios, en este caso representados por las trompetas. Estos 6 juicios que se liberan por la rotura de los sellos, tienen que ver con acontecimientos que ya están ocurriendo en la historia, como la guerra, el hambre, el militarismo o la muerte, destacando aquí el quinto sello que indica el clamor de los cristanos que a lo largo de la historia están siendo perseguidos o martirizados; como decimos el sexto sello prepara a la siguiente serie de juicios (las siete trompetas).

            En este momento también aparece una referencia a los 144.000 personas selladas (el sello aquí indica pertenencia a Cristo y por tanto salvadas), que coinciden justamente con 12.000 de cada una de las 12 tribus de Israel, pero esta cifra no indica para nada que esta see el número total de personas salvas por Cristo Jesús (el Salvador) sino que también se aparece en este capítulo siete una “una gran multitud, la cual nadie podía contar, de todas naciones y tribus y pueblos y lenguas, que estaban delante del trono y en la presencia del Cordero” que como más adelante indica son salvas, por tanto todo esto indica el conjunto de todos los creyentes, judíos o gentiles, que forman la iglesia.

            En el capítulo 8 y hasta el 11 aparecen las siete trompetas, como decimos la segunda seria de otros siete juicios. La simbología de la trompeta recuerda al anuncio de un juicio (como ocurrió en la caida de los muros de Jericó). Aquí encontramos un simbolismo menos literal, con una sucesion “in crescendo” de cataclismos que indican un periodo de bastante sufrimiento y tribulación en la humanidad, marcado también por la presencia espiritual marcada de Satanás y el mundo espiritual maligno. No obstante se indica una salvación del pueblo de Dios, aunque no elimina el sufrimiento de su iglesia debido a la extensión y magnitud de estas tribulaciones (persecución humana y también diabólica), si bien al final Dios juzgará a los malignos y salvará a los escogidos.

            El capítulo 11 es el más dificil de interpretar de Apocalipsis; Aquí vemos dos testigos, que representan a todos los seguidores de Dios durante esta terrible época de la humanidad, las visiones del templo de Jerusalén representan no obstante, la protección de Dios. El número que corresponde a tres años y medio (1260 días) indican un periodo incompleto (la mitad de siete, el número completo o perfecto).  La iglesia aquí representada dará testimonio y a la vez sufrirá por ello (simbolizado por Sodoma, Jerusalén y “la gran ciudad”, es decir Roma). Finalmente aparecerá la séptima trompeta, de nuevo como preludio a la tercera y última seria de juicios, en este caso, las copas.

José A. Cervero 2019

           

0 Comentarios

Añadir Comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.